El “Brexit” sorprendió tanto a británicos como a extranjeros y ha dejado en el aire el futuro marco de relaciones entre el Reino Unido y el resto de países de la Unión Europea.
Más allá del posible impacto económico que veremos a largo plazo, dependiendo siempre del acuerdo al que, finalmente, se llegue con la Unión Europea, a corto plazo la incertidumbre sobre necesidades básicas, como puede ser viajar, preocupa a los británicos que deseen visitar o residir en España; es por ello que queremos abordar aquí una de las cuestiones más planteadas: ¿será preciso un visado para los ciudadanos del británicos para viajar a España?
Si bien es cierto que hay muchas incógnitas todavía sin resolver sobre qué nos deparará el futuro con el “Brexit” , sí podemos confirmar que en abril de 2019, el Consejo y el Parlamento Europeos acordaron que, después del “Brexit”, los ciudadanos de Reino Unido que viajen a los países del espacio “Schengen” para una estancia corta (90 días en un plazo de 180 días) podrán entrar en el territorio de la Unión Europea sin necesidad de obtener un visado.
De acuerdo con las normas de la UE, la exención de visados se concede en condiciones de reciprocidad, ya que el Reino Unido ha declarado igualmente, y de manera expresa, que no tiene ninguna intención de solicitar visado a ciudadanos de la UE cuando viajen a su país para estancias cortas.
Sin embargo, en el caso de que el Reino Unido introduzca en el futuro un requisito de visado para los nacionales de cualquiera de los Estados miembro de la UE, se aplicará el mecanismo de reciprocidad existente y las instituciones de la UE y sus Estados miembro se comprometerán a implementar sin demora la exigencia del visado, por lo que la Comisión Europea vigilará el respeto del principio de reciprocidad de forma continua e informará de inmediato al Parlamento Europeo y al Consejo sobre cualquier evolución que pudiera poner en peligro el respeto de este principio.
Podemos afirmar que la complejidad de la situación requiere no apresurar las cosas, tomarse tiempo y esperar que se llegue a los mejores acuerdos posibles.